jueves, 15 de agosto de 2013

Capitulo 4: Demonio

A la mañana siguiente…
Akari se despertó debido a que alguien golpeaba la puerta, por un momento pensó que seria Ryoma, sin embargo Ryoma llega y entra, decidió levantarse a abrir la puerta era una pequeña que ya había visto antes:
-         ¿Eh? Oye… ¿tu no eres? – Akari recordó al instante, era la chica que buscaba ayuda para poder salvar a su hermana – Ya recordé, tu eres Narumi. Te recuerdo del centro del pueblo. Recuerdo que el equipo de Yagyuu te iba a ayudar
-         Si – respondió la niña con tristeza – Pero Yagyuu-san... aun no ha vuelto de la misión de rescate –
-         ¡¿En serio?! – exclamo la pelirroja asustada –
-         Mi hermana solo necesitaba a alguien que pudiese sacar o romper las rocas que la tenían atrapada, no pudimos sacarla anteriormente porque caían rocas cada cierto rato dificultándonos el trabajo… esa montaña se esta desmoronando sola
-         ¿Desmoronando sola? Que raro… - se cuestiono Akari –
-         Yagyuu es capaz de cortar la cantidad de rocas suficientes para hacerle un escape a mi hermana. Creímos que eso seria suficiente para salvar a mi hermana – la chica lucia muy apenada
-         ¿Y Yagyuu-san aun no regresa? – pregunto Ryoma quien se encontraba detrás de la pequeña – En principio, la parece misión ser muy sencilla
-         Ryoma… - Akari estaba apretando sus puños con cierta emoción – ¿Estas pensando lo mismo que yo?
-         ¿Ah? – pregunto el chico confundido –
-         ¡Si! ¡Vamos a buscarlos! – dijo Akari tomándole las manos a la niña –
-         ¿De veras? Gracias – la niña ya se veía mas contenta -
-         ¿Por qué nosotros? – pregunto Ryoma algo desconfiado - ¿Por qué no un equipo de rescate?
-         He escuchado que ustedes ya han salvado gente antes y han salido exitosos a pesar de no ser un equipo oficial – claramente Narumi se había enterado de Katsuo y Kachiro –
-         No te preocupes, cuenta con nosotros – dijo Akari - ¡Vamos, Ryoma!
Akari llevo algunos objetos útiles en el pañuelo de Ryoma, y acompañados de Narumi se dirigieron a la Sima silenciosa. Subieron un gran cañón hasta quedar enfrente de lo que parecía la entrada a una cueva:
-         Vaya, que precipicio tan profundo – se dijo así mismo Ryoma mirando al vacío desde una orilla –
-         ¿Tu hermana Kurumi se ha perdido en este cañón, Narumi? – pregunto Akari para confirmar –
-         Así es, lamento involucrarlos en esto – Narumi hizo un pequeña reverencia –
-         No te preocupes – le dijo Akari para que la pequeña no se preocupara - ¡Vamos, Ryoma!
-         ¡Esperen! – les grito la niña antes de que entraran –
-         Si, ¿Qué pasa? – le pregunto Akari por la reacción repentina de la niña, esta puso una cara muy preocupada que asusto un poco a Akari –
-         Olvide contarles una cosa… Este cañón se conoce como “Sima Silenciosa” porque se rumorea que un terrible monstruo duerme aquí.
-         ¡¿Un… monstruo?! – exclamo la chica –
-         Interesante – Ryoma a diferencia de Akari se veía incluso más entusiasmado en la misión –
-         ¡Si! Pero… - la pequeña se puso nerviosa al ver la reacción de Akari – quizá solo sea una leyenda… Aunque también es verdad que Yagyuu-san no ha vuelto, pensé que tenía que decírselos…
-         Mi estomago… como me duele – Akari se sostenía fuertemente el estomago simulando que le dolía –
-         ¡Eh! ¡¿Qué ocurre?! – pregunto preocupada Narumi –
-         Mi estomago… de repente me duele… creo que he desayunado en mal estado. Quiero decir, Ryoma tú también te sientes mal ¿No? – le pregunto esperando que su amigo le siguiera el juego –
-         Para nada – respondió como si nada Ryoma –
-         Bueno… aun así, creo que yo no puedo hacerme cargo de este rescate… - termino por decir Akari –
-         ¿En serio? – Narumi se veía triste pero después puso una cara un poco mas alegre – Pero si Akari… no has desayunado todavía
-         Ah… creo que el dolor se ha ido – Akari se sentía avergonzada por lo que acaba de hacer – Esta bien, ahora si iré…
-         Bueno, dijiste que había un monstruo ¿Cómo es? – le pregunto Ryoma a la niña –
-         Pues no estoy muy segura… Es una leyenda no se si existe o no – dijo la pobre un poco apenada –
-         Bueno, que se le va a hacer… - suspiro Akari y sonrío – Esperemos que el monstruo no exista después de todo
-         Por favor, tengan cuidado – les dijo por ultimo Narumi –
-         Bueno, vamos Ryoma – ambos ingresaron a la cueva dejando a la pequeña atrás –
La razón por que Akari no quería que hubiese un monstruo aparte de porque tenia miedo era porque no sabría como defender a Ryoma de eso, después de lo que paso con Kite ella se prometió que cada vez que arrastrara a Ryoma a algún lado para una misión lo protegería y ayudaría lo mas que pudiese aun si le costaba su vida; Era conciente que aun si se sacrificaba por Ryoma al monstruo habría una probabilidad de que el monstruo también acabe con el y esa no era la idea.
A lo largo del viaje, Akari atacaba todo animal que se acercara a Ryoma, pero la mayoría de las veces el tenia que ayudarla para acabar con el enemigo. Aun así Akari daba su mejor esfuerzo, hacia de escudo todas las veces necesarias, sin embargo a Ryoma no comprendía porque hacia eso pero sabia que no tendría tiempo para preguntárselo hasta acabar la misión. Sin embargo Akari se sobre exigió tanto que Ryoma tuvo que protegerla hasta que ella comiera una baya, una vez que acabo con el enemigo fue cuando antes de continuar con la misión Ryoma la detuvo:
- ¿Por qué haces eso? – le pregunto a su acompañante que yacía sentada terminando de comer la baya –
- ¿Por qué hago que?... – ella sabia a que se refería pero no quería responderle –
- No necesito que protejas, puedo defenderme – le dijo en un tono duro –
- No quiero que te lastimes… - respondió algo molesta –
- Que no ves que soy yo quien debería protegerte – se excuso –
- Bueno, ¡Que no ves que yo no quiero perderte! – A Ryoma no respondió pues al oír tal cosa de tal forma quedo perplejo – Perdón… no debí haber gritado… pero desde que llegue eres al único que tengo… por eso
- … Eso lo se, pero no tienes que hacer cosas innecesarias, ya te lo dije antes, cuando me necesites yo ya estaré a tu lado – le tendió la mano y esta se afirmo de el para levantarse – Vamos, tenemos una misión que cumplir. Todavía nos falta mucho
Akari sonrío y continuaron con la misión de salvar a la pobre Kurumi, ella dejo de creerse escudo humano y comenzaron a hacer las cosas como un verdadero equipo. Todo espacio que dejaba Ryoma lo cubría Akari de manera que ambos salían lo mejor posible de cada combate.
Después de un largo camino consiguieron llegar al fondo, donde había un montón de rocas destrozadas:
-         ¿Aquí es donde Kurumi? Pero si ya esta todo destrozado… - Akari vio que todas las rocas ya habían sido partidas a la mitad, de repente se pudo ver a alguien que se acercaba, era Kurumi – ¡Tu! – ambos se acercaron a la pequeña que se veía muy espantada – Hemos venido a rescatarte ¿Estas bien?
-         Si… yo estoy bien… - Kurumi no dejaba de temblar y hablaba despacio – pero…
-         ¡Genial! Vamos, tu hermana te espera – dijo Akari acariciándole la cabeza a la pequeña para que se tranquilizara –
-         Yagyuu-san esta allá atrás… - al decir esto tanto Ryoma como Akari se acordaron de que el había venido a salvarla pero por alguna razón todavía no regresaba –
-         ¿Cómo? ¿Yagyuu-san? – Akari miro a Ryoma para dirigirse mas allá – Vamos – los tres caminaron entre los escombros hasta llegar donde Yagyuu quien yacía en el suelo –
-         ¡Oye! ¡Reacciona! – le grito Ryoma a Yagyuu desde lejos ambos se iban a acercar cuando de repente se Yagyuu hablo –
-         Olvídense de mí… - Yagyuu intento levantarse pero no puedo así que solo les grito - ¡Salgan de aquí!
-         ¿Cómo? – pregunto confusa Akari - ¡¿Qué salgamos de aquí?! – de repente la luz se corto - ¡¿Qué pasa?!
-         Aquí viene… - dijo Yagyuu de repente se escucho un estruendo –
-         Apártense – sonó una voz desconocida – El ha osado perturbar mi propiedad ¡No tengo piedad con los entrometidos! ¡Y eso los incluye a ustedes! – cuando la luz volvió Yagyuu ya no estaba solo había una misteriosa persona parada en su lugar, de ropajes llamativos que recordaban a los rayos y truenos –
-         Ya…Yagyuu-san no esta aquí… - dije asustada Akari –
-         … Desapareció – Ryoma también estaba sorprendido –
-         Soy Sanada Genishiro, la encarnación del rayo – el hombre misterioso hablaba con gran tono de superioridad – Si quieren salvar a su amigo, demuestren que son lo suficientemente buenos como para enfrentarse conmigo escalando el monte trueno – Sanada se retiro dando gran salto dando la impresión de que volaba –
-         … Sanada… así que ese era el monstruo legendario – repitió Ryoma –
Después de esa escena tan impactante volvieron con Kurumi a la base donde Narumi los esperaba. A pesar al menos Narumi era feliz por recuperar a su hermana:
-         ¡Te han salvado! ¡Esto es maravilloso! – Narumi no dejaba de llorar al poder volver a abrazar a su hermana –
-         Pero… aunque yo estoy a salvo… Yagyuu-san sigue en peligro – se lamentaba aun Kurumi –
-         Por favor… cuéntanos lo que ocurrió – le pidió Akari –
-         De acuerdo… - Kurumi se limpio un poco las lagrimas – Yagyuu-san corto las rocas sin problema… y consiguió sacarme de entre las rocas. Pero cuando salí de allí muchas otras rocas cayeron desmoronando aun más el cañón, yo no sufrí ningún daño pues Yagyuu-san me aparto de allí rápido. Entonces fue cuando apareció esa persona.
-         Esa persona… dijo que era Sanada… - hizo recuerdo Ryoma –
-         ¿Has dicho Sanada? – pregunto una voz misteriosa –
-         ¡Tezuka-san! – exclamo Akari, era Tezuka y su equipo –
-         Sanada… - dijo Tezuka con aires de preocupación – Es uno de los tres demonios… Tenia entendido que llevaba dormido mucho tiempo
-         Entonces… ¿Yagyuu-san lo despertó? – pregunto la pelirroja –
-         No – dijo certeramente Tezuka – Solo fue la gota que colmo el vaso. Para empezar no es normal que ese cañón se desmoronara solo. Debe ser otro síntoma de que algo no va bien últimamente. La ira de Sanada se debe a que se ha despertado pues el lugar donde dormía se esta destruyendo. Debemos salvar a Yagyuu
-         Pero Sanada… Sus ataques no son una cosa fácil – decía preocupado Oishi –
-         Lo se… - afirmo Tezuka – Tendremos que ir con cuidado –
-         Nosotros también iremos – dijo de repente Ryoma, era muy raro que el pidiera ir a una misión pero Akari no lo detuvo, después de todo era un equipo y se acompañarían en las buenas y en las malas –
-         ¿Qué? – pregunto Tezuka sorprendido – Es muy peligroso. Sanada es poderoso, es demasiado para ustedes
-         No nos subestimen, además ¿Quién le teme a ese Sanada? – Ryoma actuaba de manera tan engreída que Akari no le quedo de otra que seguirle el juego –
-         ¿Miedo? ¿Que es eso? – dijo Akari con el tono mas engreído que pudo –
-         La probabilidad de que los acabe con un ataque es de 40% y de que lo haga con dos de 90% pues sus ataques son 100% potentes - les dijo Inui – Cualquier ataque que los alcance los dejara desorientados
-         ¿Eso es todo? – les pregunto Ryoma –
-         Sanada es un rival muy duro – les advirtió Oishi – Puede que no logren regresar ¿Aun quieren ir?
-         ¡No tenemos miedo! – les grito Akari – Somos un equipo, iremos a ayudar a Yagyuu-san
-         …De acuerdo. Veo que tienen lo necesario – Tezuka después de aceptar les explico el plan – Ambos grupos tomaran rutas distintas a través de monte trueno. Partiremos apenas estemos listo. Vayan solo cuando hayan preparado todo ¡Nuestro objetivo es salvar a Yagyuu! ¡No bajéis la guardia!
-         ¡Esforcémonos Ryoma! – le dijo Akari entusiasmada pero de verdad –
Ryoma se fue temprano a su casa, Akari pensó que tal vez tendría algo importante que hacer, sin embargo por alguna razón volvió a la base antes de que anocheciera:
-         Ryoma… ¿Qué haces aquí? – pregunto extrañada la chica –
-         Voy a dormir aquí – le dijo el chico entrando - ¿Molesto?
-         No… solo que… es extraño, supongo – dijo riéndose un poco –
-         No es extraño, es la base la construí yo después de todo – de repente sonó la puerta – Ahí viene, escóndete – le dijo en voz baja –
-         ¿Qué? ¿Por qué? – Ryoma no le respondió solo la escondió debajo de la paja y fue a abrir la puerta –
-         ¿Qué ocurre, padre? – pregunto el muchacho al hombre que se encontraba en la puerta –
-         ¿Y? ¿Dónde esta la chica? – le pregunto su padre en tono pícaro –
-         Eres molesto papá, aquí no hay nadie – hizo un esfuerzo porque no entrara pero igual paso –
-         Vamos pequeño que no te de pena mostrarme a tu novia – Nanjiroh reviso con la vista todo el lugar, mientras Akari hacia un esfuerzo por no respirar muy fuerte – A mi no me engañas, soy tu padre y te vi con ella
-         Pudo haber sido alguien que conocí solo de paso ¿Qué te hace pensar que es algo conmigo? – pregunto Ryoma molesto –
-         Porque te vi, lucias demasiado cercano como para que solo sea alguien que conociste, y bueno, ya que ella no esta me dirás ¿Te gusta? – Y por mucho que Nanjiroh miraba a su hijo, el no tuvo problema en responderle –
-         Para nada – fue tan serio que Nanjiroh le incomodo –
-         Hay cosas más importantes que estar entrenando por ahí ¿sabes? – le dijo pero al parecer no iba a hacerlo cambiar de parecer –
-         ¿Me vas a dejar descansar?
-         Esta bien niño – dijo yéndose – solo procura pasar mañana por la casa
A pesar de que Nanjiroh se había ido, Akari no salio de su escondite. Que era ella para Ryoma exactamente, ¿Solo su amiga? ¿Por qué hacia tanto por ella? Y peor aun ¿Qué sentía ella por el?
- ¿No vas a salir? – le pregunto a Ryoma sacando la paja de encima de ella –
- Si… - se levanto y se saco la paja que le quedaba –
- ¿Ocurre algo? – le pregunto al verle la cara a Akari que mostraba completo descontento –
- No… solo pensaba… sabes, tengo sueño, voy a dormir al tiro – una vez arreglo la cama – se tendió encima – Buenas noches
- Esta bien, mañana será un día largo ¿no? – le recordó –
- Si, es verdad, así que… que duermas bien – Ryoma se tendió en la misma cama pero mucho más allá pues había mucho espacio –
Tal vez… Ryoma no quería nada con ella por que era consiente de que se iría, quería pensar eso. Quizá por eso hasta ella negaba sus propios sentimientos pero prefirió no pensar mas en es y dormir, salvas a Yagyuu era mas importante.

No hay comentarios:

Publicar un comentario